Café Cargado con Ramón Latorre, el Premio Nacional de Ciencias que puso a Valparaíso en el circuito internacional de la ciencia.
Cautivado por su potencial patrimonial eligió a Valparaíso para instalar un Centro Interdisciplinario de Neurociencia en las ruinas del edificio que albergó al primer Congreso Nacional. Nacionalizado porteño de corazón habla de los desafíos de esta ciudad portuaria que quiere resucitar de sus cenizas. Perros vagos, seguridad,T2, Mall en Barón, educación. Ningún tema deja ausente este científico que pensó en ser actor y que asegura que no se considera inteligente. Un postdoctorado hijo de la gratuidad, asegura, que invitará a las vecinas a tomar mate en su centro y ya es amigo del cura del lugar aunque se califica de ateo. A los 60 años se hizo regionalista y dejó Santiago y ya cumplio 74 transformado en un buen provinciano. Un lolo septuagenario.